La Saga de los
Templarios, cuarta parte: La Noche de las Gaviotas 1975
La última entrega de la saga es
en muchas formas un retorno a las bases, esto se debe probablemente en parte a
que Amando de Ossorio había admitido que después de la segunda se había quedado
sin ideas y también había admitido estar sumamente molesto con el aspecto de la
tercera (con toda razón).
Como dato adicional, de esta película
se ha dicho que fue en parte inspirada por las historias de H.P Lovecraft las
cuales no he leído pero parecen tener como tema en común la visita del
protagonista a un pueblo aislado poblado por gente supersticiosa, este elemento
es bastante recurrente en las historias de horror de una forma u otra, por lo
que similar a lo que paso con los Nazgul y la primera película, me parece mas
una coincidencia, especialmente porque Ossorio nunca fue particularmente
discreto en mencionar sus influencias y no he visto que mencionara a este autor
entre ellas.
La trama:
En durante una noche en tiempos
medievales, una pareja se cruza con un grupo de caballeros templarios, el
hombre es asesinado pero la mujer es llevada al castillo en donde los
templarios proceden a sacrificarla lo cual se les hace fácil porque esta dama
estaba armada con el escote más grande de la comarca, gracias a todos los
cielos comenzamos la película como tiene que ser!
A mediados de los setentas, el
Doctor Henry Stein y su esposa Joan, llegan a un pequeño pueblo pesquero en
donde a sido asignado como reemplazo del antiguo doctor, con solo llegar al pueblo absolutamente todos
los habitantes les hacen saber de manera totalmente transparente que no los
quieren por ahí, no mediante agresividad si no mediante indiferencia, ni
siquiera los dueños de las tiendas tienen deseos de atenderlos lo que trae la
pregunta de cómo subsiste la economía de el pueblo, pero luego veremos que ese
es el menor de los problemas.
El matrimonio llega a su casa cerca
de un acantilado con vista a la playa y conocen a Teddy, el idiota del pueblo
(si, otro de esos) que aparentemente provee diversión para toda la familia ya
que tanto niños como adultos lo apedrean constantemente por lo que la pareja lo
acoge durante la noche, ya que por obvias razones, no quiere pasar al descubierto. Junto con Teddy, la pareja se
hace amiga de Lucy, una joven que viene a trabajar para ellos como un ama de
llaves y que más tarde tendrá un papel importante en el desarrollo de la
historia.
Durante una noche, Joan
despierta violentamente al escuchar un grito de mujer, su esposo le consuela
diciéndole que posiblemente son las gaviotas que se escuchan, ”pero las
gaviotas no vuelan de noche”, aclara
Joan, a lo que el doctor le pide que por favor se duerma de una buena vez y
mañana trataran de averiguar que pasa (cállese y déjeme dormir carajo!).
Al día siguiente Joan va de
compras al pueblo y comienza a responder ante la hostilidad de los locales
revelando que sabe que algo hacen en la noche, mas tarde conoce a Lucy en la
calle, y le pide que venga a ayudarle con los quehaceres de la casa aunque es obvio
que ella realmente no hace nada durante el día… pero bueno, cuestión de estatus.
Más tarde se escuchan las campanas pero Henry asegura que se trata de un
mecanismo para que los barcos no choquen contra la costa ya que hace neblina,
alguien toca a la puerta y es una joven que les implora por asilo, pero Lucy
insiste que no es conveniente que le permitan quedarse, cuando los padres de la
chica llegan a llevársela el doctor ya la ha sedado por lo que es más fácil
atarla a las piedras en la playa en donde llegan los templarios por la noche a
llevarse a sus víctimas hacia su templo secreto donde son finalmente
sacrificadas y sus cuerpos son lentamente consumidos de manera muy lenta por
las únicas criaturas más lentas que los mismos templarios: cangrejos!.
El Dr. Stein se encuentra
buscando a la joven que atendió más temprano, Teddy le indica la ubicación de
la casa de los padres de la muchacha, por lo que más tarde será ajusticiado. Cuando
finalmente llega a la casa de sus padres estos le dicen que la muchacha se fue
a la ciudad. Esa misma noche los pueblerinos regresan a la casa del matrimonio
y esta vez se llevan a Lucy con ellos.
Lucy es de hecho una víctima
bastante más calmada que las anteriores, pero mientras los templarios llegan
por ella, Henry tiene un ataque de consciencia y decide ir a la playa a
buscarla, Lucy ahora le explica el motivo de los sacrificios: hace seis siglos,
los templarios destruyeron todo el pueblo, es por esto que cada siete años
durante siete noches les entregan jóvenes como ofrenda así que se trata de un
bien mayor, a pesar de los deseos altruistas de Lucy, Henry la rescata y
escapan de los templarios . Esa noche mientras planean el escape (ya están en
un pueblo maldito, abiertamente hostil y plagado con caballeros centenarios,
que tanto tienen que planear?) el auto de Henry es robado en lo que se ha convertido
en un motivo común de la saga: el método de transporte es robado, por lo que
optan por parapetarse dentro de la casa por lo que resta de la noche hasta que
puedan escapar.
Los templarios están destrozando
las puertas y la ventanas de la casa, obviamente, ya antes destruyeron todo un
pueblo, finalmente logran entrar y… Henry les prende fuego con una lámpara…
WHAT…THE…FUCK…, lo peor es que por algún motivo Henry y co. Todavía les temen a
estas criaturas por lo que escapan por el ático, por suerte los templarios
dejaron sus caballos exactamente debajo
de la ventana por donde escapan así que el resto no es difícil de suponer.
Al menos esta vez los caballos parecen tener una especie de protección
incluida, básicamente si se los roban,
regresan al castillo en donde Henry se convierte en un mago de las suposiciones
que en cuestión de un minuto revela que:
1- Los templarios necesitan de un alma
femenina para sus rituales
2- Joan es la elegida ya que Lucy
quebró las leyes del pueblo, esto no explica para nada como una mujer que en su
vida ha respetado tales reglas tiene más
valor que una que recién las rompe pero
no pensemos mucho en eso.
3- Un ídolo de piedra dentro del
castillo es la causa de todo, así que romperlo acabara con el maleficio.
Así que Henry y Joan botan la
estatua al suelo, lo que hace que se
rompa y que los templarios sufran unas hemorragias craneanas terribles que
finalmente les provocan la muerte.
Lo Bueno:
El regreso de los templarios a
tierra firme fue una excelente decisión después de ver lo mal que quedo la película
anterior, de hecho, ver a los templarios cabalgar en la playa es simplemente genial
y se convierte en un elemento más que agrega a la ya de por si genial ambientación
de la saga, junto con ciertas cosas como el tañir de las campanas, los gritos
de las gaviotas y los excelentes escenarios de el castillo suman en vez de restar
a los puntos fuertes de la saga.
El añadir el aspecto de todo un
pueblo hostil en contra de los protagonistas añade un nuevo nivel de suspenso a
la situación que anteriormente no habíamos podido disfrutar, por supuesto que
las agresiones son de tipo pasivo pero aun así añaden a la atmósfera general.
La verdad es que el robo de los
caballos es difícil de definir, no deja de ser ridículo que caballos fantasmales
puedan ser sujetos a robo PERO esta vez tienen un sistema mejor que cualquier
sistema satelital, si alguien se roba un caballo se jodío porque si no se lanza
de un caballo a toda velocidad por lo que sería alcanzado por los templarios,
entonces será trasladado a la misma guarida de los templarios, donde hay aun
mas templarios!.
Lo Malo:
Ciertamente la velocidad nunca
ha sido el fuerte de los templarios cuando andan a pie, sin embargo la película
en general tiene escenas en si que dañan el ritmo general de la historia, hay
toda una escena que dura aproximadamente tres minutos que consiste en ver
cangrejos caminando sobre un cuerpo, es verdad que en estas películas el ritmo
suele ser diferente a las películas modernas, sin embarco cosas como estas
llegan a la exageración.
Lamentablemente los templarios
vuelven a ser bastante fáciles de derrotar en esta entrega, resulta lógico pensar
que a los trapos comunes y corrientes se les puede prender fuego, sin embargo
si estamos hablando de una especie de momia que lleva cientos de años
atormentando a un pueblo en intervalos de siete años por lo que tendrían alguna
protección mágica en contra del fuego, después de todo no puede ser que a nadie
antes nunca se le ocurrió acercarles una antorcha o algo, pero no, simplemente una candela mal puesta puede poner
fin a la amenaza.
El final deja mucho que desear,
aunque es el final de Star Wars y The Avengers años antes de que estos lo
hicieran, esencialmente los héroes destruyen la fuente de poder de los enemigos
lo que de algún modo les causa la muerte, en este caso tiene más sentido ya que
al ser criaturas mágicas si lo que las mantiene con vida es destruido ellos
dejan de existir, pero por otra parte la serie de conclusiones de Henry en los últimos
minutos son más que espectaculares y solo pueden atribuirse a un buen
intencionado pero mal realizado intento por dejar menos huecos que en la película
anterior.
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